Nombre: Mª de las Mercedes Martín Amor (Mary Mer)
Edad: 36
Natural de: Nacida en Madrid, desde pequeña vivió en Pozoblanco.
¿De dónde viene su pasión por la Semana Santa? Sería difícil de precisar. Mi abuelo materno fue capataz del paso de Nuestra Señora de los Dolores, cuando las cuadrillas eran pagadas. Mi abuela materna fue su camarera. La madrina (Da. Emilia Aparircio) fue el alma mater de mi Hermandad de los Dolores. Así es dificil que en casa no se viva la Hermandad en plenitud.
Cuando tomo conciencia me vinculo con Salesianos y formo parte de la primera cuadrilla de costaleras del Cristo del Perdón. Y hace diez años me embarque en la aventura fundacional de la Caridad.
Concluiría que la llevo en el ADN ¿no?
¿Puede decirme un recuerdo de la infancia de nuestra Semana Mayor? Es curioso, mi primer recuerdo de la Semana Santa no tiene imagenes de pasión. Somos mi hermana y yo recortando grecas para las velas o acudiendo de la mano de mi madre a la Setena de la Virgen.
¿A qué Hermandad o Hermandades perteneces? Pertenezco a la Hermandad Servita y Cofradía de Nazarenas de María Santísima de los Dolores y a la Cofradía del Santisimo Cristo de la Caridad en su Via Crucis. Vinculada a la Cofradía Salesiana del Santísimo Cristo del Perdon y Nuestra Señora de la Amargura por Antiguos Alumnos y como costalera.
¿Qué opina sobre el momento en que se encuentra el mundo del costal en Pozoblanco? Creo que es un momento delicado, como cualquier transición. Es el momento de hacer las cosas no bien, sino mejor.
Mi percepción, seguro que algo tendenciosa, es la de que pasamos de la cuadrilla de mucho corazón a la de mucha cabeza. Entiéndaseme. Hemos vivido unos primeros años de cuadrillas recien nacidas, guiadas por el instinto y la ilusión; y nos dirigimos hacia tiempos en los que la formación, el conocimiento, la cabeza, van tomando posiciones. La cuestión está en que no “profesionalicemos” este servicio a la Hermandad.
Debemos cuidar el sentido que damos a este SERVICIO. Muchas personas ven la Semana Santa a través nuestro, y nuestra actitud puede crear confusión. No se vive más, ni mejor, la Semana Santa por sacar más pasos a la calle, sino por la calidad y sentido con que se hace.
En cualquier caso, cerrarnos en banda y no aprender unas cuadrillas de otras; no aceptar los diferentes modos de trabajar; o entrar en comparaciones absurdas,... nos perjudica más de lo que nos puede beneficiar
Tú fuiste costalera y una lesión te privó de continuar tu vida costalera ¿Qué experiencia viviste o vives aún de ese querer y no poder? Fue una lesión de rodilla en la que nada influyó que me metiera debajo de un paso. Tras recuperarme de la operación volví pero ya no era lo mismo.
Mi experiencia es que debajo de un paso tienes que ser muy “egoista”. Si tu trabajas bien, pensando en no hacerte daño y en cargar con el peso que te corresponde, lo estas haciendo solidaria y responsablemente con el resto de tu cuadrilla. Cuando supe que yo no podría con mi parte del trabajo, muy a mi pesar, lo deje. Para que yo disfrute de un ratito de pasion costalera no puedo hacer pasar un mal rato a las personas que trabajan costal con costal conmigo.
Ver a tus hermanas costaleras y no poder estar ahí con ellas, se hace duro. Es inevitable tener un pellizco en el estomago y rezar para que todo salga muy bien.
¿Cuál ha sido tu mejor momento debajo de un paso? Mi momento debajo de un paso tiene más que ver con las personas con las que he compartido el trabajo costalero que con cualquier otra cosa.
La relación con el resto de personas que forman la cuadrilla, compartirlo con mi(s) hermana(s) y buenas amigas, anécdotas muy divertidas y otras no tanto. El sonido de alguna que otra marcha que te pone las pilas cuando flaquean las fuerzas (Bendición solía ser como un redbull, jajajaja) Muchos días de ensayo con sus posteriores ratos de tertulia.
Si me tuviera que quedar con un recuerdo, es sin duda el de la primera salida procesional de la cuadrilla de costaleras. Un día de perros, con lluvia y frio. Salimos a la calle, y yo estaba fuera del paso, con Ana Victoria. Una gota nos calló en la cara y las dos nos miramos. Cuando terminó la procesión nos volvimos a mirar, esta vez con una enorme sonrisa.
¿Con qué tres adjetivos definirías a la figura del costalero? Responsable, solidario y devoción
¿Qué opinas de la formación técnica, por supuesto de fe, para costaleros y capataces? ¿Es necesaria o es simplemente una moda pasajera? Son necesarias, ambas, y mucho. Si se queda en una moda, lo estaremos haciendo de pena.
Pero, si es posible, y ya lo apuntaba antes, que estemos dando más importancia a la tecnica que a la fé.
Desde mi punto de vista, desde que se dejó de pagar a las cuadrillas, la devoción tiene que ganar terreno; eso implica un compromiso como cofrade, y no hay un buen cofrade que no se preocupe también de hacer crecer su fe y su implicación con la vida pastoral de su hermandad. Y esto no es incompatible con que saquemos más de un paso, ni con querer conocer de primera mano como se trabaja en otros sitios.
¿Afición, devoción o ambas? Todo es necesario en su justa medida.
¿Crees que las Hermandades deberían de invertir en “formar” antes que en “comprar”? Responder de un modo generalizado a esta pregunta sería injusto, pues no hay dos hermandades con las mismas necesidades. Habrá cofradías en las que urja invertir para que sea posible la formación; y habrá hermandades que tengan que formarse para dar un buen uso a sus inversiones.
La mujer costalera, se ha ido incorporando poco a poco en nuestra Semana Santa y somos un ejemplo a seguir para muchas cuadrillas en la que este tema sigue siendo algo espinoso, sobre todo en capitales. ¿Cómo te sientes tanto como mujer como costalera? ¿Deberíamos apostar más por la mujer de lo que se hace? Como mujer costalera me siento orgullosa; claro que esto forma parte de la indiosincracia de nuesta Semana Santa. Razones sociológicas e históricas hacen que la mujer tome un papel importante en las hermanades y que su integración en la vida cofrade sea un echo natural. Nosotros no vemos raro a mujeres en Junta de Gobierno, ni que haya un hábito propio para ellas, ni ...
Sería necio no reconocer que las cuadrillas de mujeres, por naturaleza, son más inestables que las de hombres; y que la edad media es más baja, lo que también las condiciona mucho. Habría que apostar por ellas, motivarlas, facilitarles recursos que les permitan estar aquí, hacerlas más participes de la vida de hermandad,... ¡¡ojalá hubiera una receta!!
Existen varios tipos de marchas, “de bulla”, “clásicas”, “fúnebres”… ¿Piensas que todas tienen cabida en nuestra Semana Santa? ¿Con cuales te quedas? Es indiscutible que todas tienen cabida y cada una su momento.
No me imagino a una hermandad de Viernes Santo con campanilleros, como no veo a otra de domingo de ramos con Mater Dolorosa. Aunque abunden los disparates.
Me quedo con todas, elegidas con sentido y tocadas en su contexto preciso.
Una imagen: Mi Dolorosa
Una calle: Santa Marta
Un momento: Cuando la procesión se recoge y se hace el silencio en el templo
Un hábito: nazarena
Un ejemplo a seguir: ufff!!! Depende para que... hay muchas buenas personas ánonimas con las que nos encontramos en nuestra vida que son un ejemplo. Como cristiana el Evangelio marca bien el camino y la vida de los santos es un buen ejemplo a seguir. Jesús de Nazaret es un ideal dificil de alcanzar.
Una Hermandad: ¿Qué brazo me corto?
Una Flor: la rosa aqua
Un lugar cofrade: Cualquiera donde se reunan un par de cofrades para hacer crecer la Iglesia en sus Hermandades, para disfrutar de la música cofrade, el olor a incienso, una buena revirá o una intensa tertulia.
Un recuerdo y Una anécdota: la primera vez que salí de nazarena, con ocho años (como se hacía antiguamente); la descordinación entre mi madre y mi abuela hizo que llegara a la Iglesia tarde y a medio vestir y casi me quedo sin salir, mientras alguno me decía: “niña que se te va la procesion”.
Para terminar…Creo en la costalera/o responsable, que sabe que lo suyo es mucho más que cargar peso; es acercar los misterios de la pasión a un pueblo entero. (esto es del final de mi pregón)
1 comentarios:
Enhorabuena Marymer, todo un ejemplo a seguir, Juan José hermano costalero y compañero, gracias por hacer este blog y tener nuestra propia representación en internet, que sabemos que nunca es facil mantener un blog a flote.
Un saludo y seguid luchando por este bendito arte los 365 días al año. ¡GRACIAS!
Jorge Bravo
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