El Capataz Elige a su Equipo

Según la encuesta que proponíamos en estos últimos días, los resultados a la pregunta ¿Quién debe de elegir el equipo que trabajará con un capataz (segundo y contraguías)?, los resultados han sido los siguientes:

El Capataz 95%
La Hermandad 6%
Los Vocales 0%
El Presidente/a 0%

En teoría debería de ser así, El Capataz de cualquier caso debe de ser quien elija a su equipo que será el que le acompañará durante el trabajo, equipo que debe de ser de su total confianza y que este implicado con el proyecto de cada cuadrilla al 100%, no valen medias tintas ni siquiera vale ponerse el traje para el día en cuestión ya que el trabajo de un equipo tiene que tomar muchas decisiones a veces buenas y a veces menos buenas para el buen funcionamiento de una cuadrilla y de nada serviría que la Hermandad eligiera en vez de ser el propio Capataz.
En algunas ocasiones se da la circunstancia de que esto no es del todo así y se asigna el "cargo" (palabra que nunca entenderé en esto) de contraguía, incluso de capataz, según los méritos obtenidos durante un tiempo determinado y es la triste realidad pero es así y luego pues claro, vienen las consecuencias, consecuencias que cada uno se puede imaginar y que yo por supuesto no voy a citar aquí, pero es curioso como se repiten algunas palabras utilizadas a la defensiva o a la ofensiva, según convenga, para justificar "formas y maneras no adecuadas" por decirlo de una manera sutil, tradición, personalidad, indiosincracia, austeridad.... la moda sevillana, la moda cordobesa, la moda de Santispalo, yo que sé!!! pero llega un momento en que uno se pregunta: ¿Existe alguna palabra de estas que pueda adjetivar cualquiera de los principios básicos? NO. Pero aún así, seguimos y seguimos sin crecer, sin evolucionar, sin seguir aprendiendo, porque quien tiene la razón soy yo y nadie más. En fin cosas de la vida y de estos menesteres que le vamos a hacer, mientras una banda crece musicalmente, los pasos en muchas ocasiones se limitan a salir y a entrar como puedan y en cualquier circunstancia. Para las mentes perversas, estoy generalizando geográficamente, no me refiero exclusivamente a las cuadrillas de Pozoblanco, ya que aquí hay mucho que alavar por lo menos por la intención de querer seguir aprendiendo y la actitud que se tiene (sigo generalizando) y es eso el principio de cualquier proyecto u objetivo.