ENTREVISTA A JOSE MARIA GARRIDO BALLESTEROS

Nombre: José María Garrido Ballesteros

Edad: 23

Natural de: Pozoblanco

¿De dónde le viene su pasión por la Semana Santa?

Nací en un entorno puramente cofradiero. Fue mi padre quien sembró la semilla cofrade que aún perdura en mi familia. A través de su figura me he impregnado de los sentimientos soledanos más profundos y he vivido siempre con pasión desmedida todo lo que rodea al mundo cofrade. Seguramente le deba a él también que cada Viernes Santo acompañe con mi tambor a la Señora del “Cerro”.

¿Desde qué edad estás en este “mundillo” del costal?

Desde los 20.

¿Puede decirme un recuerdo de su infancia relacionada con nuestra Semana Mayor?

La radiante ilusión de aquellas primeras salidas de Borriquito el Domingo de Ramos. Allí se forjó el espíritu cofrade de muchas personas.
¿A que Hermandad o hermandades Perteneces?
A la Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad.

¿Cuántas Hermandades sacas a la calle?

La Cofradía de Ntro. Padre Jesús Amarrado a la Columna y María Santísima de la Salud y el 24 de Mayo a María Auxiliadora.

¿Costaleros más participes de la hermandad o exclusivamente durante los ensayos y en la salida procesional?

Ambos perfiles de costaleros son respetables y válidos en la realidad de una Hermandad.

¿Cómo valoras la asistencia y aceptación de varios actos, eventos, etc. enfocados a costaleros que se han realizado en Pozoblanco y, cómo crees que resultaría un Congreso sobre costaleros y capataces en la ciudad?

De forma muy positiva, aunque con mesura.
Es palpable cómo cada vez más este tipo de eventos genera una gran interés entre el mundo del costal pozoalbense. También se percibe una nueva corriente de jóvenes costaleros que apuestan por la formación como principal vía de evolución y progreso de las cuadrillas.
No obstante, pienso que aún queda mucho camino por andar. La implicación de las cuadrillas en este tipo de actos debe ser aún mayor, empezando por los que dirigen el timón de las mismas, los capataces.
En cuanto al Congreso, pienso que sería un acierto su organización. Sería vital incidir en la importancia que supondría su celebración. Eventos como éste pueden hacernos conscientes de las fortalezas y debilidades de nuestra Semana Mayor y saber exactamente hacia dónde queremos ir.

¿Cuadrillas mixtas, cuadrillas de mujeres o de hombres o cuadrillas sólo masculinas?

Si dejamos a un margen las circunstancias de necesidad de costaleros que han vivido algunas de nuestras Hermandades en los últimos años, las cuáles han llevado a la creación de cuadrillas mixtas, pienso que desde la perspectiva de la técnica las cuadrillas exclusivamente masculinas o femeninas aportan mejores resultados.

¿Costaleros uniformados o vestuario libre?

Uniformados a excepción del calzado, donde ante todo debe de primar la comodidad y el bienestar del costalero.

¿Cofradía en la calle de día o de noche?

Me gusta ver salir a una Cofradía de día y recogerse de noche.

¿Cuál debe ser el principal motivo para meterse en una trabajadera?

Considero que los motivos que pueden impulsar a una persona a ser costalero son muy íntimos y personales, y todos respetables. Aún así, el sentido principal sería la fe y devoción por los titulares.

¿Cuál es tu mejor momento debajo de un paso?

Recuerdo con especial cariño la pasada procesión de María Auxiliadora. Era para mí una cuenta pendiente ser costalero de la Madre Salesiana. Debajo de su paso se acumularon numerosos recuerdos de mis años escolares en el colegio y tuve la suerte de compartir trabajadera con grandes amigos y hermanos costaleros.

¿Estética o comodidad? Comodidad

¿Los costaleros deberían de realizar ejercicios físicos antes de prepararse para cargar un paso procesional?

Por supuesto, como en cualquier otro ejercicio físico.

¿Crees que así se evitarían muchas lesiones en un futuro?

Sí, aunque creo que es igualmente importante una ropa adecuada y una correcta igualá en la prevención de lesiones.

Una Marcha: Lloras en tu Soledad, de Nicolás Barbero.

Una Virgen: La Soledad.

Un Cristo: La Sed, de Sevilla.

Un capataz: Aquel cuya máxima principal sea preservar la salud de sus costaleros.

Un hábito: El de la Hermandad de la Soledad de San Lorenzo de Sevilla, con su majestuosa túnica de cola.

Una flor: Las “Marías” de cera, aunque no sean una flor como tal.

Una calle: San Zoilo, en Córdoba.

Una Hermandad: Ánimas de Córdoba.

Un lugar cofrade: Una Casa de Hermandad que albergue una buena tertulia cofrade.

Un secreto: Mejor mantenerlo como secreto…

Una procesión: El día a día.

¿Calidad o Cantidad? Calidad, sin lugar a dudas.

Un recuerdo de la Semana Santa que nunca se te olvidara:

Un Viernes Santo subiendo la calle Feria detrás de Nuestra Señora de La Soledad, con los sones del Puente de San Bernardo.

Un momento mágico:

Sucedió la pasada Cuaresma en Córdoba, la noche en la que la Hermandad del Gitano realizaba su mudá. Me encontraba con mi amigo Cerrillo en la Parroquia de San Andrés aguardando la llegada de los pasos. Nos desplazamos a la sacristía y al encenderse la luz pude contemplar a Jesús de las Penas y María Stma. De la Esperanza, en el silencio y recogimiento de aquella pequeña habitación. Los titulares estaban recién vestidos, listos para realizar Estación de Penitencia e instantes antes de ser subidos a los pasos.
Realmente fue un momento mágico que siempre conservaré en mi memoria.

Para terminar:

Me gustaría destacar la creación de iniciativas como la de este blog de Costaleros de Pozoblanco, que contribuyen al engrandecimiento de nuestra Semana Santa. Asimismo quisiera agradecer a Juan José Fernández el detalle de haber contado conmigo para expresar mis modestas ideas y vivencias.