ENTREVISTA A BARTOLOME CALERO RUBIO

15 septiembre 2009


Nombre: Bartolomé Calero Rubio
Edad: 37 años
Natural de: Pozoblanco


¿De dónde le viene su pasión por la semana santa?
Desde pequeño tocaba en la banda de los Salesianos, luego, a los 14 años en la banda de la Soledad, a los 18 me vestí de nazareno penitente y posteriormente, a los 23 años decidí convertirme en costalero.
Aunque estas son a grueso modo las etapas por las que he ido pasando, y que marcan mi devoción y pasión por nuestra Semana Santa, si es cierto que bajo ellas y como fundamento, ha estado presente en todo momento mi FE en Jesucristo y en su Iglesia, lo cual ha hecho que viva esta Semana Mayor como una expresión personal de fe y de religiosidad popular.

¿Desde que edad estas en este “mundillo” del costal?
Desde los 23 años.

¿A que Hermandad o hermandades Perteneces?
Hermandad Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad

¿Cuántas Hermandades sacas a la calle?
En Semana Santa la Soledad y el 24 de mayo a María Auxiliadora

¿Hermandad en la cuadrilla o cuadrilla de la Hermandad?
¿Por qué hay que distinguirlo o separarlo cuando ambas situaciones son necesarias?
Una cuadrilla sin hermandad, muy posiblemente esté destinada al fracaso, puesto que no basta con un-a solo-a costalero-a para portar un paso, sino que debemos rodearnos de un grupo de personas unidas por un mismo fin, agrupadas bajo un mismo techo y entre las que debe existir un fuerte lazo de compromiso, respeto y hermandad, para llevar a cabo nuestros ensayos y salida procesional.

Por otro lado debemos tener claro (al menos yo lo tengo), que la cuadrilla debe formar parte de la Hermandad. Tener presente nuestro sentido de identidad y pertenencia a la misma, hará que nuestro esfuerzo se vea recompensado doblemente, pues satisface los motivos personales que nos lanzan a ser costaleros, así como los objetivos planteados como grupo de personas y no individualmente.

¿Costaleros más participes de la hermandad o exclusivamente durante los ensayos y en la salida procesional?
Quizás la realidad responda mejor que yo a esta pregunta.
Cierto es que nuestras Hermandades y Cofradías llenan sus agendas de actividades en pro de ellas mismas o de obras sociales, y cierto es que para ello aspiren a rodearse de muchas personas, cosa que en la mayoría de las ocasiones no sucede y el trabajo siempre se queda para los-as mismos-as. Quizás suceda esto, y al hilo de la pregunta anterior, porque no tenemos suficientemente desarrollado o no lo potenciamos debidamente nuestro sentido de identidad y pertenencia la Hermandad o Cofradía.

Por otro lado, y haciendo uso de la palabra empatía, debemos ponernos en el lugar del otro, y respetar los motivos que lo llevan a ser costalero y no a formar parte viva de la actividad de una Hermandad o Cofradía.

¿Cuadrillas mixtas, cuadrillas de mujeres o de hombres o cuadrillas solo masculinas?
Personalmente pienso que esta decisión se debe tomar en el seno de la Hermandad, bajo sus propias características, sus circunstancias y sus necesidades.

¿Costaleros uniformados o vestuario libre?
En primer lugar costaleros cómodos, que vamos a trabajar.
Por otro lado, vuelvo a responder de igual manera que en la pregunta anterior: como se decida en el seno de la Hermandad, pero ante todo proporcionando seguridad y comodidad para trabajar.

¿Cofradía en la calle de día o de noche?
Cofradías en la calle.
¿Cuál debe ser el principal motivo para meterse en una trabajadera?
Debo partir diciendo que mi principal motivo no tiene por qué ser el principal motivo de otro costalero o costalera, pues todos sabemos, que nos mueven motivos diferentes a la hora de meternos debajo de un paso.
Mi principal motivo ha sido la Fe en Jesucristo, en su vida y en el amor de María, su madre, nuestra madre.

¿Cual es tu mejor momento debajo de un paso?
La primera vez que me metí bajo el paso en mi primera Estación de Penitencia como costalero de la Virgen de la Soledad. Fue en el comienzo de la calle Guillermo Vizcaíno, junto al “Tío las pelotas”, en el año 1996. Aún lo recuerdo como si fuera ayer.

¿Los costaleros deberían de realizar ejercicios físicos antes de prepararse para cargar un paso procesional?
¡¡SI!!, pero somos un poco inconscientes y no solemos hacerlo. Yo personalmente hago algún ejercicio de piernas, cuello y estiramientos, pero muy quizás no lo necesario.
¿Crees que así se evitarían muchas lesiones en un futuro? Si

Una Marcha: Oh bendita estrella.
Una Virgen: María
Un Cristo: Jesucristo muerto y Resucitado.
Un capataz: El que se preocupa no solo porque el paso quede bien, sino por el bienestar de su cuadrilla.
Un hábito: El humilde hábito de la Nazarena soledana
Una flor: Las flores a María Auxiliadora.
Una calle: La que nos lleve a entendernos y respetarnos todos-as.
Una Hermandad: La de todos-as.
Un lugar cofrade: Una calle
Un secreto: Si lo contara dejaría de serlo.
Una procesión: Nuestra vida.
¿Calidad o Cantidad? Por supuesto calidad.

Un recuerdo de la Semana Santa que nunca se te olvidara:
Son muchos, pero me quedo con los momentos de fe importantes que he vivido, y sobre todo, con los buenos amigos y amigas que la ilusión por este mundo me ha proporcionado.

Una anécdota: Cuando comencé a salir de costalero, yo llevaba a cabo mis estudios en Córdoba. En aquellos entonces se venían haciendo 18 ensayos, y muchos de ellos eran los sábado a las 16H. Pues bien, mi profesor de Mecánica de Fluidos, tenía la costumbre de ponernos los exámenes en sábado y terminábamos sobre las 14 horas, lo que me obligaba a llevarme al examen mi bolso con la ropa para lavar y fiambreras vacías (para llenarlas en casa, claro está), para luego hacer “dedo” con la intención de llegar al ensayo a tiempo y en la mayoría de las ocasiones sin comer.


Alguna cosa para terminar: Quisiera animar a quienes no son costaleros pero quieren serlo, y a quienes ya lo son, que su mirada no se quede paralizada en la expresión plástica, del bonito, lujoso y espectacular “trozo de madera” que físicamente nuestras imágenes puedan ser, sino que miren mas allá, hacia lo espiritual, hacia donde se encuentra el sentido de este mundo cofrade que no es otro, que el AMOR que Jesucristo nos proclamó.
De esta manera, mantendremos nuestras hermandades y cofradías unidas a los fines religiosos y sociales para los que fueron creadas, impidiendo así, su transformación en meras asociaciones histórico-culturales.
Me despido, agradeciendo a Juan José Fernández su invitación a participar en esta estupenda iniciativa, como ha sido esta página web, con mi humilde y sincera opinión. Muchas gracias y ánimo para hacer de nuestras vidas, una oportunidad para ser felices y hacer felices a los demás.

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